A casi 6 años del terremoto y tsunami del 27 de febrero de 2010, la reconstrucción en Talcahuano está cerrando sus etapas, ya que en los cerros del puerto, específicamente en el sector Los Lobos, se levanta el último proyecto habitacional para damnificados.

En la Villa Los Morritos, vivirán 440 familias, cerca de 180 son damnificadas y el resto de campamentos. El proyecto en 2014 fue paralizado por la quiebra de la empresa y la obra se reinició en octubre del año pasado y a la fecha tiene casi un 70% de avance.

Rogelio Rivera, dirigente de los damnificados, recorrió la obra y señaló que en los próximos meses terminará una de las etapas más difíciles de su vida, reconociendo que en este tiempo han tenido que solventar la necesidad de vivienda con recursos propios.

La directora regional del Serviu, Maria Luz Gajardo, comentó que son dos tipos de vivienda, departamentos y casas, que van desde los 57 a los 65 metros cuadrados.

El alcalde de Talcahuano, Gastón Saavedra, informó que en la denominada “zona cero” del terremoto, la reconstrucción aún no termina, porque quedan pendientes soluciones habitacionales. “Tenemos un problema que no se ha resuelto, que tiene que ver con la construcción en sitio propio, que es más particular y tiene que ver con las EGIS que toman estos proyectos”, declaró.

En agosto se entregará el proyecto habitacional de Talcahuano, el último que se construye para los damnificados del 27F del puerto. En el resto de la región quedan 5 obras de reconstrucción pendientes, dos de ellas terminarán el próximo mes.